Una de risas (invita la casa)

En eso sí que no flaqueo. Sigo leyendo como un poseso. Alternando de todo. Últimamente una temática recurrente es la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, temas que me tienen sorbido el coco, aunque no olvido a clásicos como Vargas Llosa, Borges, etc...

Entre tanta muerte, me fascinó encontrarme de narices con Christopher Moore y su hilarante "El ángel más tonto del mundo", un descerebrado "cuento de Navidad" con crímenes, zombies e intervenciones divinas del más diverso pelo... Decir que me reí es quedarme corto. Me despanzurré vivo, como hacía tiempo que no me carcajeaba.

Supongo que es lo que pasa cuando juntas en un pueblo californiano a un ángel despistado, a un policía marihuanero casado con una esquizofrénica ex actriz de series Z, a una excéntrica divorciada vestida de Papa Noel que mata por accidente a su ex marido y luego se lía con el extraño que le ayuda a encubrir el crimen, a un científico loco que vive en un faro y que investiga las pulsiones sexuales con ayuda de la electricidad... Si a eso le añadimos un buen puñado de zombies y un murciélago gigante, el cóctel es algo más que explosivo.

Ahora acaba de publicar "Un trabajo muy sucio", que promete grandes dosis de humor negro y que me beberé en cuanto pueda. Y veo que en EEUU ya ha publicado otra que promete "You suck", una "historia de amor" en San Francisco con vampiros adolescentes como protagonistas. ¿Quién da más? Son mi actual pecadillo entre tanta lectura seria. Una excusa fenomenal para olvidarme del cutre día a día y ser (un poquito) feliz.