Rajoy en el desierto
Lo tenías todo para irte por la puerta grande: una derrota honrosa -ganando diputados- y el cariño de tu gente. Lo normal es que hubieras sido presidente de España, pero no pudo ser por lo que tú y yo sabemos. Cruel, muy cruel, pero eso es lo que hay. Lo mejor que podías hacer ahora es dejar paso y permitir la renovación en el partido. Sin embargo, te empeñas en seguir contra viento y marea, garantizando el mal rollo y la división en el PP y, ya lo verás, una durísima travesía por el desierto que te va a hacer mucho daño. Todavía estás a tiempo de sorprendernos y echarte a un lado en el congreso de junio. No creo que tengas lo que hay que tener para sorprendernos con esta muestra de humildad y grandeza. Si de verdad el futuro de España te importa tanto como dices, deberías echarle una pensadita. No te cuesta nada.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home